El barrio de Conxo
Los primeros datos de población datan de la Edad de Hierro y se encuentran en Volta do Castro. Hablamos del yacimiento prehistórico del Castriño de Conxo, compuesto por un castro prerromano y uno de los petroglifos más famosos de Galicia, con grabados de diferentes armas de la época, como espadas, escudos, alabardas…
En la interesante historia de Conxo podemos destacar entre otros, los siguientes hechos:
En 1129 (fecha que se conserva en una inscripción del claustro románico), una comunidad benedictina femenina recupera y refunda la pequeña iglesia que da origen al barrio, construyendo el monasterio de Conxo.
Sobre el año 1240 se construye el castillo de Rocha Forte, también conocido cómo castillo de los Churruchaos. Símbolo del poder señorial y de la opresión a los habitantes por parte del arzobispo de Santiago. Destruido en la Gran Guerra Irmandiña, posiblemente la mayor revuelta europea del siglo XV, entre los años 1467 y 1469, no volverá a ser levantado. Hoy se conservan la planta y muros de defensa, sótanos y gran número de los proyectiles de piedra lanzados con catapultas durante su asedio.

La historia de este barrio está muy ligada a la Universidad compostelana a través de su monasterio. Este fue colegio mayor universitario a partir de 1700 y algunos de sus frailes profesores de la Universidad. El mercedario Martín de Acevedo consigue traer para Santiago las cátedras de Medicina y Derecho en 1649.
En 1827 nace en Cornes Rosalía de Castro la mayor poeta de Galicia y autora, entre otras obras, de En las orillas del Sar, publicado en 1884 y uno de sus poemarios más famosos.
Ayuntamiento independiente
Dicen que el nombre de este barrio de Santiago deriva de Almerico Canogio, nombre del desafortunado amor de Rusuinda, asesinado en el Camino de Santiago y que, según la leyenda había sido enterrado en el entorno del monasterio.
Conxo tiene también su protagonismo en la constitución histórica de los ayuntamientos, historia que arranca en 1812 cuando las Cortes de Cádiz promulgan la primera Constitución Española. Esta pretende dotar al Estado Español de un mejor sistema administrativo, siendo los ayuntamientos uno de sus puntos más importantes, pues se pretendía sacarlos del caos y la decadencia en la que estaban sumidos bajo el absolutismo monárquico del Antiguo Régimen. La reacción absolutista frustrará por dos veces, 1814 y 1823, estos intentos de reforma.

Muerto Fernando VII y bajo el reinado de María Cristina, inspirados por las reformas que procuraban las Cortes de Cádiz, el 23 de julio de 1835 se redactará el real decreto que regulará los nuevos ayuntamientos, bajo lo que se constituirá el de Conxo. Este comprendía as parroquias de San Martiño de Laraño, Santa María de Villestro, Santa María de Figueiras, San Cristovo do Eixo, San Martiño de Aríns, Santa Baia de Bando y Santa María de Marrozos, llegando a tener alrededor de 15.000 habitantes.
La dictadura de Primo de Rivera promulgará en 1924 el Estatuto Municipal, nueva norma reguladora de los ayuntamientos de España. Con esta norma Primo de Rivera pretendía regenerar la vida municipal y combatir el caciquismo, pero esto no ocurrió, porque al no celebrarse las prometidas elecciones, los alcaldes fueron elegidos a dedo por los caciques de siempre.
Si bien el Estatuto Municipal de 1924 no conseguirá acabar con el caciquismo, si acabará con el reinado de Conxo como ayuntamiento independiente, ya que a partir de 1925 pasará a formar parte de Santiago.
La actual parroquia de Conxo se reparte en los siguientes lugares: Conxo de Arriba, Conxo de Abaixo, Cornes, A Curuxeira, A Fervenza, Monte do Seixo, A Nogueira, Pai da Cana, Ponte da Rocha, Ponte Pereda, O Porto, Poza Real, Rial, Rocha Vella, Torrente y Volta do Castro.
Barrio festivo
El de Conxo es uno de los barrios con más peso de la ciudad, destacando por su gran participación en los carnavales donde suelen ser ganadores de los premios a la mejor comparsa. Visita obligada merece el tradicional Belén que la familia Otero Moreira de Torrente organiza desde el año 1946 con unas 700 figuras, donde no faltan casas, cabañas, estanques, fuentes luminosas, lavaderos y cascadas …
Mucha fama tienen sus fiestas: la Merced y San Serapio, que se festejan los fines de semana de la segunda y tercera semana de septiembre respectivamente, y que están íntimamente ligadas al monasterio y a la orden mercedaria. En las fiestas de la Merced sale el rosario en procesión desde las mercedarias hasta Conxo y en el San Serapio la procesión arranca de las Platerías camino del barrio.
Cómo suponemos que pocas personas sabrán quien era el famoso San Serapio, vamos a hacer una breve recensión. Según la tradición mercedaria, envuelta en leyendas, San Serapio es un santo de origen irlandés que nace en el 1179 y que estuvo enrolado cómo soldado en los ejércitos de Ricardo Corazón de León y de Alfonso VIII. Convertido en mercedario en 1222, es nombrado redentor realizando varias redenciones de niños en territorios musulmanes, hasta que él mismo cae cautivo en torno a 1240 y sufre martirio en el norte de África. En la portada del monasterio figura San Serapio, junto a otros tres santos mártires mercedarios del siglo XIII.
