A POSTERIORI…
Alrededor de la estación de Cornes, se levantan almacenes de aceite, vino, carbón, fruta, sal, madera, cemento, etc.
Alrededor de la estación de Cornes, se levantan almacenes de aceite, vino, carbón, fruta, sal, madera, cemento, etc.
Los vecinos de Compostela aprovechaban los primeros trenes especiales para ir a la playa o hasta el santuario de la Esclavitud.
En 1882, la gerencia de la compañía pasa a manos de John Trulock, abuelo de Camilo José Cela. Trullock dirigió durante años la compañía, y para dinamizar su explotación planteó refundir la sociedad El Compostelano en otra nueva y ampliar la línea a Pontevedra, lo que conseguiría en 1889.
La locomotora que consiguió mayor fama entre Compostela y Carril se denominaba “Sar” en honor a nuestro río y fue popularmente rebautizada cómo “La Sarita”. Era la locomotora del gerente Trullock, y en la actualidad es uno de los iconos de esta línea ya desaparecida. Hizo el último viaje en 1968 en el trayecto Vigo-Vilagarcía.
Ramón María del Valle-Inclán fue otra de las figuras literarias vinculadas al ferrocarril, pues su padre, el escritor Ramón Valle Bermúdez fue accionista y secretario del consejo de administración del ferrocarril compostelano.
En 1886 la compañía cambia su nombre por el de “The West Galicia Railway Company Limited”, posteriormente reducida a “The West Galicia”, y popularmente conocida como la “Te-Bes”. Además, la compañía trasladó su domicilio social a Londres, así como el Consejo de Administración, aunque la Gerencia estuvo siempre en Vilagarcía.
En 1928, la compañía gallega es absorbida por MZOV, y esta posteriormente, por la Compañía Nacional de Los Ferrocarriles del Oeste de España, que se integrará en la recién constituida RENFE en 1941.
En el año 1992 cierran definitivamente los talleres ferroviarios creados en Vilagarcía de Arousa en 1880, y finalmente en 2007, con la entrada en servicio del nuevo trazado de la línea del “Eje Atlántico”, se cierra el viejo apeadero y antigua estación de Casal.